Los dividendos de un palmarés
Columnistas 4 Agosto, 2010
Por José María Leiva Leiva
España, en plena depresión económica, espera tocar los dividendos de su inobjetable victoria en el recién concluido mundial de Sudáfrica. Desde luego, más allá de la euforia reinante, el desempleo bate récords y el crecimiento no despega. Golpeada por el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008 conjugado con la crisis financiera internacional, España se debate para salir de la recesión, con una modesta alza del PIB de 0,1% en el primer trimestre de 2010.
El índice de desempleo se eleva a 20%, récord de la zona euro, el déficit explotó a 11,2% del PIB y los observadores estiman que el país afronta varios desafíos para salir de la crisis: reformar su mercado laboral y su sistema bancario y contener su gasto público. De hecho, el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ha sido fuertemente criticado por reconocer tarde que el país había entrado en crisis y por no tomar medidas a su tiempo.
“Creo, sinceramente, que usted no está en condiciones de gobernar y el mejor servicio que puede hacer al país para cortar este calvario es disolver el parlamento y convocar elecciones. Su tiempo se ha agotado y lo sabe. Desde todas las instancias europeas e internacionales han estado, durante años, pidiéndole que redujera el déficit, y no ha hecho caso. Dos años reclamándole unas reformas estructurales, y no ha hecho caso”, le reprochó el líder del Partido Popular (PP), principal formación opositora española.
En el último semestre, el gobierno del PSOE, presionado por los mercados y por la Eurozona, adoptó un severo plan de ahorro de 15,000 millones de euros este año y el próximo, que incluye el recorte de los sueldos de los funcionarios en 2010 y la congelación en 2011. Asimismo aprobó con urgencia la reforma del mercado laboral con el fin de crear empleo, que alcanzó el 20% de la población activa, y la reforma de las cajas de ahorro, afectadas por la crisis.
Y tiene pendiente reformar las pensiones de jubilación, además de elaborar unos presupuestos para 2011 que deben incluir los pedidos de recorte que le reclama la Comisión Europea. No obstante ello, se estima, que la obtención de su primer campeonato mundial de fútbol podría aliviar de manera temporal los males españoles, por ejemplo gracias a un impulso en el consumo de los hogares.
“Cuando una sociedad está feliz, siempre se traslada al consumo… aunque no sabemos en qué cuantía” declaró la Confederación española de Comercio, que agrupa cerca de 450,000 comerciantes minoristas. “Ganar un mundial desde luego es una prueba que cuando nos proponemos algo lo conseguimos y que además nos crecemos ante las dificultades. Todo eso es bueno, la confianza en nuestro país dentro y fuera”, aseguró Elena Salgado, la ministra de Economía del gobierno.
Según un estudio de la Universidad de Navarra, este éxito de la selección en el mundial de fútbol ha mejorado la imagen exterior de España, y tendrá efectos económicos positivos en sectores como el turismo, la cultura, artes y moda.
El estudio, elaborado por el Centro de Medios, Reputación e Intangibles (MRI) del centro académico, que ha analizado más de 300 mil noticias en prensa escrita en inglés, subraya que el título logrado y el estilo impuesto por la selección española de fútbol han reforzado notablemente los factores emocionales asociados a la percepción exterior de la marca “España”.
Esta revalorización, ha señalado la Universidad de Navarra en un comunicado, tendrá efectos económicos positivos “sobre todo en aquellos sectores donde el componente emocional es más importante” ha explicado Francesc Pujol, autor del estudio, quien ha subrayado que también incrementará el prestigio internacional de la liga nacional de fútbol.
Otrora, un estudio del banco ABN Amro, efectuado con ocasión del mundial 2006 evocaba un aumento del 0.7% en el crecimiento proyectado para el campeón, una cifra que parece demasiado ambiciosa para varios economistas. Por supuesto, un elemento que podría frenar el entusiasmo de los consumidores es que el endeudamiento privado español ya es elevado, del 178% del PIB, y que la mala situación del empleo debería limitar el empleo. Según un estudio del gabinete Nielsen, la confianza de los consumidores alcanzó en el segundo trimestre del año un nivel bajo récord.
En todo caso, un sector económico que podría aprovechar el efecto del mundial es el del turismo, que aporta el 10% del PIB, recordando que España es el tercer destino turístico detrás de Francia y Estados Unidos. “En la promoción turística, la imagen positiva es muy importante… Barcelona y Madrid, que albergan a los dos equipos más grandes del país, deberían capitalizar la victoria lo más temprano posible”, declaró Marcio Favilla, director ejecutivo de la Organización Mundial del Turismo (OMT), con sede en Madrid.
Tomado del periódico la Tribuna de Honduras.
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