• Hasta una ambulancia fue víctima del enorme bache
“EL HUECO LO ARREGLABAN Y AL OTRO DÍA SE VOLVÍA A HACER”
• Hasta una ambulancia fue víctima del enorme bache
“EL HUECO LO ARREGLABAN Y AL OTRO DÍA SE VOLVÍA A HACER”
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El vehículo Terios que frenó de repente al toparse con el hueco. De espaldas su conductor, el estadounidense Erbert Shoeppe. |
Según una vecina que vive al frente de la estructura, siempre le hacían arreglos y siempre se volvía a abrir en el asfalto.
“Ese bendito hueco ha ocasionado varios accidentes aquí. Hace unos días hasta una ambulancia con pacientes chocó con un carro, por culpa del hueco. Lo reparan y lo reparan y a los 15 días se vuelve a hacer. Tenía que pasar una tragedia como ésta para que arreglaran bien el hueco” indicó Carmen Morales, aún asustada por escuchar las explosiones del cisterna y al ver la clase de incendio que se desató.
ESTRUENDOS, EXPLOSIÓN Y MUERTE
Ella estaba afuera de su vivienda cuando ocurrió el accidente con saldo fatal.
“Vi que venía un Terios amarillo que por el hueco frenó y el camión le dio por detrás. En ese momento escuché el estruendo y la explosión. En el río había gente bañándose, salieron corriendo asustados, pegaban gritos. Las llamas eran grandes, yo pensé lo peor, dejé la casa y salí corriendo también para donde un vecino” recordó doña Carmen.
Los que viajaban en el vehículo Terios son la pareja de estadounidenses Erbert Shoeppe y Cristine Lynn, turistas de Dakota del Norte.
Ambos, por suerte, salieron ilesos.
Los extranjeros contaron que venían de Liberia, donde se hospedan.
Los dos lograron salir de la cabina del vehículo, segundos antes de que todo ardiera.
Los pasajeros del camión también salieron. Anoche, no se conocía la identidad de la víctima, ni si viajaba a pie o en alguno de los carros.
Al parecer, se trata de un joven de cerca de 20 años.
Tomado del periódico Diario Extra de Costa Rica.
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