PREPARÉMONOS ANTE EL INVIERNO
PREPARÉMONOS ANTE EL INVIERNO
Por William Gómez V.
Todos los años insisto en la necesidad de organizarnos para enfrentar los retos que siempre nos presenta la naturaleza y no esperar que el gobierno llegue, nos saque empapados, solo con lo que tenemos puesto, y nos meta en un gimnasio junto con toda la gente del barrio o el pueblo en los llamados albergues, pudiendo habernos organizado antes y evitar semejante drama.
No es solo lo mencionado sino también dejar la casa sola, a merced de los infelices que se valen de nuestra desgracia para robarnos lo que nos queda, no solo electrodomésticos sino también hasta la ropa. En fin, quedamos con lo que andamos puesto para empezar de nuevo y con nuestro propio esfuerzo, porque cuando la tragedia está en su clímax y los medios de comunicación la cubren, los ofrecimientos, las promesas sobran, pero cuando todo pasa, entonces lo ofrecido desaparece y es cuando somos nosotros los que debemos enfrentar la adversidad solos.
Pues bien, todo lo anterior y mucho más que no detallo por razones de espacio es lo que cada año me motiva a pedirles a mis conciudadanos establecidos en zonas de riesgo ante inundaciones, derrumbes, vientos, etc. que se organicen los fines de semana para levantar muros o diques con piedras y cemento, dragar a pala -aunque suene duro- los lechos de ríos o quebradas que parecen inofensivos pero que se convierten en asesinos con sus lechos cargados de agua, monitorear los cerros que rodean nuestro barrio o pueblo, en fin, prevenir por nosotros mismos y no esperar que la catástrofe nos golpee porque la ayuda es la básica para que no nos muramos, pero los daños colaterales nadie los cubre.
Tomado del periódico Diario Extra de Costa Rica.
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