Religioso despojado de nacionalidad por golpistas hondureños
Seguiré en la lucha, estoy en las manos del pueblo y seguiré caminando con el pueblo, dijo el padre Andrés Tamayo, amenazado de expulsión del país por el gobierno de facto

Su persistencia de luchar junto al pueblo por el regreso de la constitucionalidad y su rechazo al gobierno de facto hizo que los golpistas despojaran de la nacionalidad hondureña al padre Andrés Tamayo, nacido en El Salvador.
Tamayo, participante en las marchas populares que, diariamente, recorren las calles de Tegucigalpa y otras ciudades para reclamar la restitución en su cargo del presidente Manuel Zelaya, derrocado por un golpe militar, había renunciado a su nacionalidad original, la salvadoreña, para permanecer en Honduras y trabajar por la preservación de los recursos naturales del país centroamericano.
Funcionarios de Migración del gobierno de los golpistas le informaron al sacerdote católico que su acta de nacionalización estaba anulada, acción considerada como una represión política, por haberse manifestado a favor del presidente legítimo Manuel Zelaya y combatir por el retorno de la constitucionalidad.
"Estoy en las manos del pueblo, soy del pueblo y seguiré caminando con el pueblo", anunció el padre tras conocer la información sobre su situación migratoria en Honduras.
Luego de informar que la Iglesia Católica, cuya jerarquía apoya el golpe, decidió separarlo de la parroquia de Salamá, Olancho (zona nororiental del país), denunció que, con tal determinación, se busca que no ejerza influencia en la gente que apoya al presidente Zelaya.
"La Iglesia (Católica) prohíbe que yo siga caminando con el pueblo", reclamó.
En tanto, la Dirección de Migración y Extranjería no ha se pronunciado aún sobre la situación legal de Tamayo.
Aunque el sacerdote nació en El Salvador, logró la nacionalidad hondureña luego de 22 años de vivir en el país. Dirigió el Movimiento Ambientalista de Olancho, (MAO), departamento ubicado en la parte nororiental del país y limita al sur con Nicaragua.
Tamayo decidió formar parte del movimiento para evitar que la deforestación en la zona continuara. Por sus esfuerzos en el MAO, figuró como nominado al "Premio Front Line 2008 para Defensores de los Derechos Humanos en Riesgo".
El pasado 23 de agosto el Gobierno de facto de Honduras lo amenazó con expulsarlo del país por apoyar el regreso del presidente Zelaya, según lo denunció.Tomado del periódico La Voz del Sandinismo de Nicaragua.
No extraña esta actitud de los dictadores son las mismas en todos ellos, aquí en Costa Rica pasa lo mismo, cundo Pilar Cisneros denuncio la corrupción en los dos millones de dolares de BCIE, Rodrigo Arias el hermano de Oscar Arias, espeto en su respuesta "fijese en el numero de su cédula" los extrajeros nacionalizados en Costa Rica somos numero 8 al comienzo de nuestro documento de identidad, ese fue el argumento en esa ocasión, al suscrito en julio de 2009, cuando Oscar Arias visita Guápiles, en la entrega de unas casas de bonos de vivienda, el suscrito protesto decentemente con un rotulo sencillo, este señor se veía evidente mente enojado, cuando le toca hablar dice: "ese rotulo es contrario al acto que estamos realizando, ese señor es salvadoreño, cuando vine hacer propaganda del TLC se tiro a las llantas de mi carro, es intolerante" en ese momento le corte los insultos y le conteste "el intolerante sos vos, son un manipulador estar manipulando al pueblo", no continuo aludiendome, en este país nadie es mas que nadie, todos somos iguales ante la ley, de tal manera, que este dictadorcillo no tiene derecho de humillar a nadie. ¡¡¡BASTA YA!!! !!!NO MAS CORRUPCIÓN¡¡¡
Lic. Félix Domínguez
08:15 p.m. 09/09/09
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