ARISTA DE LA DEMOCRACIA Y LA DICTADURA
ARISTA DE LA DEMOCRACIA Y LA DICTADURA
Róger Churnside
“Arista”, en los diccionarios de español, significa intersección entre dos superficies o planos; y, en la actividad política costarricense, se califica al seguimiento de Óscar Arias con el mismo término. En este artículo, aplico la palabra en los dos sentidos para plantear la conjetura o hipótesis de que los hermanos Arias, encabezando un gobierno escogido en el “plano” democrático, lo acercan peligrosamente a otro muy distinto, el dictatorial.
Amigas y amigos lectores, ahora que nos aproximamos al final de esta campaña política histórica, someto, con gran preocupación, las siguientes observaciones a su examen, las cuales ustedes deberán verificar e interpretar por su cuenta, para tomar las acciones que juzguen conveniente:
• Respecto al Poder Judicial, específicamente la Sala Constitucional, don Óscar Arias fue favorecido por un pronunciamiento en el sentido de que podía aspirar a una segunda elección presidencial.
• El Tribunal Supremo de Elecciones ha sido tímido o sospechosamente cauteloso ante cuestionamientos de los Arias y Sánchez por expresiones y acciones impropias en procesos de sufragio.
• La Asamblea Legislativa eligió a la Contralora General de la República principalmente con los votos de los diputados del mismo partido que llevó a don Óscar Arias al poder.
• La red de empresas e intereses económico-financieros privados conocida como SAMA, que inclusive envuelve inversiones de la Iglesia Católica Romana, se ha extendido y consolidado bajo control directo o indirecto de la familia Arias.
• El Presidente Arias expresó públicamente su preferencia por doña Laura Chinchilla, como candidata presidencial del Partido Liberación Nacional; y ella se comprometió a continuar los programas, políticas o líneas generales de su gobierno.
• La diputada Ofelia Tautelbaum dijo que planteó a don Óscar Arias, su interés en la Defensoría de los Habitantes y él reconoció que la apoyaba para el cargo; así, ella fue eventualmente electa por la Asamblea Legislativa, con el apoyo unánime de los diputados del Partido Liberación Nacional.
• Distinguidos analistas políticos y reconocidos formadores de opinión pública de diferentes ideologías o afiliaciones partidarias han denunciado las características y consecuencias de todo lo anterior, como una concentración y centralización de poder inédita en la historia de Costa Rica.
Repito, estimada lectora, estimado lector, que a usted le corresponde verificar esas observaciones. En cuanto a su interpretación, pienso lo siguiente: nuestra democracia está en peligro; se violan los frenos y contrapesos entre poderes del Estado y de éste respecto a la sociedad civil; dirigidos por el gobierno actual, bordeamos un precipicio que marca el lindero entre democracia en las alturas, donde se despliega la vida, y dictadura en las bajuras, donde predomina la muerte.
Sin embargo, no tome demasiado a pecho las precarias opiniones mías sobre la materia, las cuales sólo me atreví a expresar por “temor y temblor”, en palabras del pensador danés Søren Kierkegaard (1813-1855) hace ciento sesenta y siete años. Tómese usted mismo en serio, porque la responsabilidad ciudadana es suya y en sus manos estarán las papeletas el próximo 7 de febrero.
Tomado del periódico La Extra de Costa Rica.
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