Aspirante presidencial bajó protagonismo
Rodrigo Arias sigue su pelea pero ‘de a callado’
Prioriza defensa en Fiscalía y encuentros con jóvenes, sin descuidar lo político
Opta por guardar silencio tras anuncio prematuro y baja acogida popular
Álvaro Murillo alvaromurillo@nacion.com 11:28 p.m. 13/07/2011
El exministro de la Presidencia Rodrigo Arias Sánchez decidió desde hace varias semanas poner silenciador a su proyecto político de ser candidato presidencial en febrero del 2014, pero sigue su pelea “de a callado”.
Imagenes/Fotos
Arias, a quien la encuesta de Unimer de marzo le acreditó una opinión favorable por cada tres desfavorables, ahora también dedica esfuerzo en defenderse de la investigación que en su contra lleva el Ministerio Público.
Ahí enfrenta un proceso legal por los supuestos delitos de peculado, fraude de ley y reconocimiento ilegal de beneficios laborales, por el manejo de consultorías del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) en el 2007 y el 2008, como ministro.
También invierte tiempo en actividades con grupos de jóvenes liberacionistas centradas en energía, gobernabilidad y emprendedurismo, según detalló Pablo Guerén, quien repitió que el aspirante presidencial no desea atender ahora a la prensa.
La última vez que lo hizo fue la mañana del martes 31 de mayo, cuando varios periodistas aguardaban el final de una comparecencia de monseñor Hugo Barrantes en el Ministerio Público.
De repente vieron salir a Rodrigo Arias, que recién acababa la declaración por el caso del BCIE abierto en su contra por el pago de cuestionadas consultorías.
Fue una sorpresa mutua. Arias no esperaba ver tanto periodista y los reporteros jamás sospecharon ver salir primero al exministro, acompañado por su abogado Francisco Castillo y su asesor Guerén.
No le quedó más que dar declaraciones a la prensa y dejarse tomar fotos, pero fue una excepción insalvable.
Así actúa después del prematuro anuncio de su aspiración presidencial, de un tímido enfrentamiento con el gobierno de Laura Chinchilla y de superar una comisión legislativa que investigó las asesorías del BCIE tras conocerse controvertidas conversaciones suyas con el entonces ministro José María Tijerino sobre el caso.
Sede familiar. En su oficina, La Lilliana, ubicada en San Francisco de Heredia, Arias maneja asuntos políticos y de negocios familiares.
Ahí llegan colaboradores y clientes, amigos políticos y compradores de los lotes de la desarrolladora inmobiliaria interesados en terrenos en San Joaquín o San Francisco.
“Él está en las cuestiones de él. Un perfil muy bajo después de la exitosa campaña de alcaldes. Sacamos 59 alcaldes y mucho por él.
“Ahora está defendiéndose de todo esto que le han hecho. Ya después se dedicará a la campaña. No veo por qué no pueda o no quiera”, dijo el diputado herediano Víctor Hugo Víquez, de confianza de Arias.
“El trabajo político ha disminuido un poco, porque estamos ayudando al Gobierno a tratar de levantar y tratando de no distorsionar”, agregó el diputado, quien resalta que toda la bancada del PLN trabaja ahora unida.Tomada del periódico la Nación de Costa Rica.
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