Gobierno clausuró el domingo Compañía de Luz y Fuerza
Cierre de compañía eléctrica en México desata furia sindical
Empresa cerrada perdía casi 30% del fluido eléctrico por fallas en sus redes
Ejecutivo mañana empieza masiva liquidación valorada en $1.492 millones
México. AFP. El gobierno mexicano se mantenía enfrentado ayer al poderoso Sindicato de Electricistas por su orden de cerrar, por ineficiente, la Compañía de Luz y Fuerza (LyF), que da electricidad a más de una quinta parte del país y empleo a 44.000 trabajadores.
Las instalaciones centrales de Luz y Fuerza, en un transitado cruce de la Ciudad de México, permanecían ayer rodeadas por vallas metálicas y vigiladas por elementos de la Policía Federal, mientras que algunos trabajadores estaban en las cercanías.
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El presidente Felipe Calderón decretó el domingo el cierre de la empresa y aseguró que sus trabajadores serán indemnizados con 2 años y medio de salario y la mayor cantidad posible volverá a trabajar en un nuevo régimen laboral.
En la madrugada del sábado, unos 1.000 policías tomaron pacíficamente las instalaciones de la compañía en la capital, donde estaban los trabajadores, así como las plantas generadoras de luz en los estados de México, Morelos e Hidalgo, todos en el centro del país, sin que se registrara ningún enfrentamiento.
El gobierno federal tomó la sorpresiva decisión como parte de las acciones para generar ahorros debido a la difícil situación económica del país, sumido en una aguda recesión.
“Es una decisión difícil, pero indispensable para la sostenibilidad de México. En el corto plazo habrá un período de transición complicado, pero en el mediano plazo esto va a generar grandes beneficios”, dijo el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, a la emisora Televisa.
Carstens defendió la decisión de liquidar LyF, que da servicio a más de 20 millones de personas, con el argumento de que la compañía generaba desde hace años una “pérdida constante de recursos”, en particular porque casi el 30% del fluido eléctrico se perdía debido a fallas en el sistema.
“Lo que se está buscando es ahorrar unas pérdidas muy sustanciales que tenía la compañía, hay que tomar en cuenta que 30% de la energía que pasaba por LyF se perdía y eso costaba 25.000 millones de pesos ($1.879 millones al año)”, enfatizó Carstens.
Según cifras oficiales, entre el el 2003 y el 2008, la compañía registró ingresos por 235.738 millones de pesos ($17.000 millones al tipo de cambio actual) contra costos de 433.290 millones (más de $32.000 millones).
Las liquidaciones a los trabajadores de LyF, que estima costarán unos $1.492 millones, empezarán a pagarse mañana y existe una “buena posibilidad” de que 10.000 empleados puedan ser recontratados y otros prestar servicios como contratistas, añadió Carstens.
El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), que aglutina a los trabajadores de LyF, llamó a sus agremiados a rechazar las liquidaciones, anunció que un grupo de abogados trabaja ya en los mecanismos para anular la decisión y mantener las plazas y convocó a una manifestación este jueves.
El sindicato fue duramente criticado por empresarios y analistas que consideran que el SME entorpecía el desarrollo de la empresa y en cambio los trabajadores recibían “ exageradas ” prestaciones.
Normalidad. Por ahora, la operación de los activos de la empresa está a cargo de 3.5000 ingenieros la Comisión Federal de Electricidad (CFE), la otra gran empresa estatal que brinda servicio en la mayor parte del país.
Alfredo Elías Ayub, director de CFE, aseguró ayer que el servicio es normal en la capital del país y su área metropolitana y espera que otros 5.000 de sus empleados se sumen en próximos días para tareas comerciales y de facturación.Tomado del periódico La Nación de Costa Rica.
El patrón se repite desprestigia las empresas estratégicas del estado y crea una percepción ante la opinión pública, para que el pueblo en general no proteste y vende las empresas del pueblo, eso es lo mismo en todos los gobiernos neoliberales, aquí es exactamente los mismo con Oscar Arias, en este momento quiere privatizar los puertos de Limón, y aduce los mismos argumentos, si fueran empresas quebradas para que las quieren los capitalistas, si el afán de estos es obtener ganancias; el mismo estado las deja morir a propósito para privatizarlas.
Lic. Félix Domínguez
07:02 a. m. 13/10/09
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