Vergüenza municipal
Jefe de información
Dice un refrán popular: “Cada pueblo tiene los gobernantes que se merece”... Pero Limón no se merece a los que gobiernan en la municipalidad del cantón Central.
Es cierto, los mismos electores limonenses los escogieron en diciembre del 2006 y hay que decirlo: se equivocaron , pero no por ello se los merecen.
La culpa de que los limonenses tengan a estos gobernantes recae en el sistema electoral que tenemos, donde los partidos imponen una lista de candidatos y no hay quite, se vota por lista, no por nombres, no por las personas idóneas y honestas.
Los limonenses, entonces, apunten su dedo a los partidos que les impusieron a estas personas y, aprovechen para castigarlos en diciembre del 2010.
Castiguen, pero no olviden que estos gobernantes municipales han colocado a la Municipalidad de Limón en el mapa judicial, porque, nunca antes, tantos funcionarios han sido arrestados por la Policía.
En pocos días, fueron detenidos el presidente del Concejo, un regidor y la jefa de patentes, como parte de una investigación por irregularidades en el otorgamiento de patentes para explotar máquinas tragamonedas.
A otro empleado, un juzgado lo inhabilitó en el cargo por seis meses por un posible fraude con boletas de combustible de los camiones recolectores de basura... ¡Y hubo días en que Limón amaneció inundado de basura!
La Municipalidad, entonces, se ha convertido en sitio habitual de allanamientos por parte de la Fiscalía y el OIJ. El último ocurrió el 28 de setiembre cuando la Policía secuestró documentos en la tesorería y la secretaría como parte de una investigación a tres regidores por aparente mal uso de viáticos.
Esta Municipalidad, entonces, es una caja de Pandora, y tanta incursión policial deja en evidencia que algo adentro no huele bien; el olor de la basura cantonal también los penetró.
Tantas investigaciones por corrupción hartan y son intolerables en un cantón donde los limonenses sufren carencias y abandono por la poca inversión municipal en arreglo de carreteras, en construcción de infraestructura deportiva, en reparación de escuelas y colegios y, sobre todo, por el pésimo servicio de recolección de la basura.
Desde aquí, como limonense, le pido al fiscal adjunto de Limón, Celso Gamboa, mantenerse implacable... y les pido a mis coterráneos, para la próxima, razonar por quiénes votan.Tomado del periódico La Nación de Costa Rica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario